De alguna manera, las casas de montaña causan cierta fascinación para quienes buscan un ambiente tranquilo y alejado de las grandes ciudades; son una forma de convertir el entorno hostil de la naturaleza en un espacio doméstico ideal para desconectarse. Sin embargo; es de suma importancia conocer a detalle todo lo que implica un proyecto de este tipo.
¿Con qué materiales debería construir una casa en montaña?
Uno de los puntos importantes a tener en cuenta a la hora de construir en una montaña es elegir los correctos materiales, ya que de ellos dependerá generar la armonía adecuada entre la casa y el entorno. Dependiendo de la ubicación y el presupuesto, es habitual el uso de madera, metal, piedra y ladrillo, con grandes ventanas para disfrutar de la hermosa vista que la naturaleza puede ofrecer.
Se trata de crear una vista orgánica, que haga notar la relación de las partes y el todo, manteniendo siempre un diálogo con el paisaje. Es recomendable la utilización de materiales vernáculos, que se identifiquen con el suelo y paisaje local, dando la sensación de entrar en comunión con el entorno.
¿Qué características de diseño debe tener una casa de montaña?
Por otro lado, la arquitectura juega un papel importante, no solo en diseño sino también en cuanto a la practicidad y funcionalidad de la construcción. Por lo general las casas de montaña utilizan los conceptos de las cabañas de caza en cuanto a calefacción, iluminación y ventilación; pero el diseño arquitectónico hará una gran diferencia.
Tanto el diseño interior y exterior de la casa deben reflejar el gusto del propietario, con los ambientes acordes a sus necesidades y la de su familia. Es recomendable que la decoración interior también incluya algún material de la zona, para darle un toque estético singular y nativo.
También es importante tener en cuenta es la cercanía de la casa con ciudades o pueblos donde se pueda encontrar lo necesario para el día a día, además de acceso a servicios de salud y educación.
Y, claro, lo mejor viene después, ya que vivir en una casa en la montaña tiene muchos beneficios, entre los que destacan: respirar aire puro de calidad, mejorar tu capacidad de resolver los problemas de forma creativa, disfrutar que el tiempo transcurra lentamente, descontaminar tus pulmones y disminuir la presión arterial.